lunes, 11 de julio de 2011

graffitis en trenes








En 1977, la emisora de televisión ABC mostró cómo viajaban los trenes pintados por el metro neoyorquino, piezas de Diablo y Pnut 2. Lee y The Fabulous Five ganaban las opiniones de la gente favorables por sus whole cars, dibujando comparaciones con Blade. Entre los whole cars y los throwups comienza una nueva generación entera de los grafiteros que desearon conseguir de nuevo a las raíces del estilo y en noviembre de 1976 The Death Squad formada por Kool 131, Sr. Jink 174 y Chair 3 con Part siendo este último el primer miembro. En un día de escuela se habían juntado una formación de los grafiteros que formarían los sistemas del deletreado por años siguientes. Sus influencias eran las viejas leyendas de la escuela como las cuales continuó escribiendo: Pel, Riff 170, y Tracy 168. La muerte del Solid 1 incitó uno de los vagones pintados más importantes de los años 70. Como Riff 170 explica: «Estaba jugando baloncesto cuando estos grafiteros que conocía se acercaron con las bolsas de la pintura, me preguntaron si quería ir con ellos a las cocheras, les dije que me había retirado. Entonces me dijeron que querían hacer un pieza para Solid 1 y sería mi último tren». Riff improvisó el contorno para el «Solid, Bot, Pone, la pieza entera de Riff». Es combinación del estilo y de los equipos inspirados en este juego como TDS, TMT, y Cia.

bodis











El arte del grafiti se extiende en el análisis de los elementos léxicos y visuales que lo definen. Pero como todo arte, no se adhiere únicamente a estos aspectos. A pesar de presentarse como palabras, letras o dibujos, el espectador nunca podrá ver estas exclusivamente como tales. El grafiti es más que una experiencia visual, es también una experiencia temporal y espacial (Lynn y Lea, 2005). Existe un conjunto de condiciones (localización, momento, influencia social, acontecimientos políticos y culturales, acontecimientos personales, etc.) que coinciden en un momento en el tiempo y que definen aquello que la pieza artística transmitirá al espectador. Este conjunto de condiciones, que no se observan explícitamente, se esconden detrás de un grafiti y son plasmadas espontáneamente mediante un espray o rotulador sobre una pared, muro o semejante y a través del uso de letras, palabras o dibujos.11 Bakhtin introdujo un concepto clave que, sin ser la intención del autor, nos ayuda en la conceptualización del grafiti desde la psicología de la comunicación. Para el, la inmediatez del momento hablado recibe el nombre de ”utterance” (en español se traduce como “palabra”, “declaración” o “expresión”) y todas las “utterances” son heteroglosicas.12 La palabra “utterance” hace referencia a aquello que se dice, la unidad del discurso, y en relación al grafiti, es aquello que se escribe o dibuja, la pieza.

el estilo bomba











Entre los romanos estaba muy extendida la costumbre de la escritura ocasional sobre muros y columnas, esgrafiada y pintada, y se han encontrado múltiples inscripciones en latín vulgar: consignas políticas, insultos, declaraciones de amor, etcétera, junto a un amplio repertorio de caricaturas y dibujos en lugares menos afectados por la erosión, como en cuevas-santuario, en muros enterrados, en las catacumbas de Roma, o en las ruinas de Pompeya y Herculano, donde quedaron protegidos por la ceniza volcánica. De época moderna se conocen también ejemplos, hechos por marineros y piratas que en sus viajes al pisar tierra dejaban sus seudónimos o iniciales marcadas sobre las piedras o grutas, quemando un trozo de corcho.Antes de la existencia del movimiento actual, el grafiti existía en su estado antiquísimo, con lápices u objetos punzantes, hasta el punto de que ciertos arquitectos españoles hacían los paramentos de los edificios con terminaciones de difícil ataque por los grafiteros (sin prever la aparición del aerosol).









Se llama grafiti (palabra plural tomada del italiano graffiti, graffire) o pintada a varias formas de inscripción o pintura, generalmente sobre mobiliario urbano. La Real Academia de la lengua española designa como "grafito" una pintada particular, y su plural correspondiente es "grafitos".
También se llama grafiti a las inscripciones que han quedado en paredes desde los tiempos del Imperio romano.
En el lenguaje común, el grafiti incluye lo que también se llama pintadas: el resultado de pintar letreros en las paredes, frecuentemente de contenido político o social, con o sin el permiso del dueño del inmueble, y el letrero o conjunto de letreros de dicho carácter que se han pintado en un lugar. También se llama grafito, por extensión, a los eslóganes que se han popularizado con estas técnicas; por ejemplo, los grafitos de los disturbios de mayo de 1968 en París: L'imagination au pouvoir (la imaginación al poder), o Sous les pavés il y a la plage (bajo los adoquines está la playa), etc. La expresión grafiti se usa también para referirse al movimiento artístico del mismo nombre, diferenciado de la pintura o como subcategoría de la misma, con su origen en el siglo XX. Fue un movimiento iniciado en los años 1960 en Nueva York, o, según aluden fuentes bibliográficas como getting from the underground, en Filadelfia.
El grafiti es uno de los cuatro elementos básicos de la cultura hip hop, donde se llama grafo o grafiti a un tipo específico. En este sentido, una pintada política no sería un grafito.